Día 3 de la Novena
Gloria cantan en el cielo
Gloria cantan en el cielo
al niño que nació en Belén
y el eco de valle en valle
repite una y otra vez.
¡Gloria!
A Dios en el cielo. (bis)
Hoy nosotros repetimos
todos juntos el cantar
que los cielos entonaron
a la entrada del portal.
¡Gloria!
A Dios en el cielo. (bis)
Adoremos al Dios niño
que nos trajo salvación:
y pidámosle su gracia
cantando todos a una voz.
¡Gloria!
A Dios en el cielo. (bis)
Cristianos, en este día
entonemos con amor
nuestro canto de alegría
como los ángeles de Dios.
Oración Inicial
¡Oh, Divino Niño Jesús! Confiando en tu infinito amor por nosotros, queremos hacer esta novena para presentarte con sencillez nuestra alegría y cariño.
Cuando vivías entre los hombres, conversabas con tu Padre Celestial con confianza y gratitud. Así queremos que sea nuestra oración, especialmente en estos días en que haremos memoria de tu Nacimiento.
Amén
Lectura:
Lucas 1, 46-56
Reflexión
¿Cuántas maravillas ha hecho Dios con nosotros, para nosotros y a través de nosotros? ¿Nos detenemos a pensar en todas las cosas hermosas que Dios nos regala cada día? Agradezcamos por este nuevo día, por las flores, por el sol, por la familia que nos cuida y protege, por el techo que tenemos en nuestras cabezas, por el alimento y por la paz.
Propósito de estos días
Hoy por la noche, anotaremos en un papel, todas las cosas lindas que nos pasaron hoy: el saludo del amigo, el agua que me refrescó cuando hacía tanto calor, compartir con los amigos, este momento, lo que creamos que es un regalo y le agradeceremos a Dios por ellas. Guardaremos el papel para los días que nos parezcan tristes.
Arrurrú
Arrurú, arrurú,
duérmete, niño Jesús.
Señora doña María,
aquí le traigo a mi hijito (bis)
pa' que le mezca la cuna
cuando llore su niñito.
Arrurú, arrurú,
duérmete, niño Jesús.
Juan Manuel se llamará,
de apellido Echeverría (bis)
para cuando usted lo llame,
señora doña María.
Arrurú, arrurú,
duérmete, niño Jesús.
Señora doña María,
deje acercarme un poquito (bis)
y sin despertar al niño,
besarle los piececitos.
Arrurú, arrurú,
duérmete, niño Jesús.
Oración Final
Querido Niño Jesús, por ti conocimos el amor del Padre, porque Tú le tendiste la mano a quien nadie más veía. Hoy te presentamos nuestras propias necesidades y las de nuestros seres queridos.
Confiamos nuestra oración también a María, Madre tuya y también nuestra, para que, como Ella, nos des fortaleza para aceptar y hacer siempre tu voluntad.
Amén
Muy de mañana
Muy de mañana María abandonó Nazaret,
un trotecillo contento la llevara a Isabel.
Nadie en el mundo sabía que ya llegó nuestro bien,
que un borriquito traía al que esperaba Israel.
Por los caminos del alba, amanecer de abril,
blandas orejas al viento y un caminar feliz.
// Dime porqué caminas así, tú, borriquito gris?
Porque jamás tuve un peso tan dulce sobre mi.//
Un pensamiento de cielo, ojos que miran sin ver,
guarda un tesoro María, en sus entrañas de miel.
¡Que silenciosa va el arca hecha de rosa y clavel!
Dentro sonríe escondido el que espera Israel.
Buenas noches, San José
Buenas noches, San José,
y en compaña de su esposa,
aquí estoy en su presencia
si sirvo de alguna cosa.
¿Dónde está San José?
¿Dónde está San José?
Con el niño y María, los tres.
Señora doña María,
aquí nos mandó mi maire
a cantarle nueve días,
nosotros, los de Pomaire.
¿Dónde está San José?
¿Dónde está San José?
Con el niño y María, los tres.
Señora doña María,
cogollito de cedrón,
a su niñito le traigo
dos metros de moletón.
¿Dónde está San José?
¿Dónde está San José?
Con el niño y María, los tres.