Misa domingo 14 de Abril
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Procesión de entrada: Alegre la mañana
Alegre la mañana que nos habla de ti,
alegre la mañana
En nombre de Dios Padre, del Hijo y del Espíritu
salimos de la noche y estrenamos la aurora
Saludamos con gozo de la luz que nos llega
Resucitada y resucitadora.
Tu mano acerca el fuego a la sombría tierra
Y el rostro de las cosas se alegra en tu presencia
Silabeas el alba igual que una palabra
Pronuncias el mar como sentencia.
Regresa desde el sueño el hombre a su memoria
Acude a su trabajo, madruga a sus dolores
Le confías la tierra y a la tarde la encuentras
Rica de pan y amarga de sudores.
Acto Penitencial
Oh, Señor, ten piedad, de nosotros, ten piedad.
Cristo, ten piedad, de nosotros, ten piedad.
Oh, Señor, ten piedad, de nosotros, ten piedad.
Gloria
Gloria a Dios en el cielo,
y en la tierra paz
a los hombres que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos, te adoramos,
te glorificamos, te damos gracias,
Señor Dios, Rey celestial,
Dios Padre, todo poderoso.
Hijo único, Jesucristo, Señor, Nuestro Dios,
Cordero de Dios, Hijo del Padre;
tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tú que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestra súplica.
Tú que estás sentado a la diestra del Padre,
ten piedad de nosotros;
porque tú eres Santo,
Sólo tú Señor, Altísimo, Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la Gloria de Dios Padre.
AMÉN
Salmo Responsorial
"Haz brillar sobre nosotros la luz de tu rostro, Señor"
Evangelio
¡Aleluya, aleluya!
Después del Evangelio
Quédate con nosotros, quédate, ven y comparte nuestro techo.
Quédate con nosotros, quédate, la oscuridad está cayendo.
Oración de los Fieles
Que te escuchemos Señor
Te presentamos nuestra oración
Dios de la Vida, Dios del Amor
Presentación de Dones: Una espiga dorada por el sol
Una espiga dorada por el sol,
El racimo que corta el viñador,
Se convierte ahora en pan y vino de amor,
En el cuerpo y la sangre del Señor. (bis)
Compartimos la misma comunión,
Somos trigo del mismo sembrador,
Un molino la vida nos tritura con dolor,
Dios nos hace eucaristía en el amor. (bis)
Como grano que ha hecho el mismo pan,
Como notas que tejen un cantar,
Como gotas de agua que se funden en el mar,
Los cristianos un cuerpo formaran. (bis)
En la mesa de Dios se sentarán,
Como hijos su pan comulgarán,
Una misma esperanza caminando cantaran,
En la vida como hermanos se amarán. (bis)
Santo
Santo, Santo, Santo es el Señor
Dios del Universo, Santo es el Señor.
El cielo y la tierra están llenos de tu gloria
Hosanna en el cielo
Bendito es el que viene en el nombre del Señor,
Hosanna en el cielo.
Padre Nuestro
Padre Nuestro, tú que estás
en los que aman la verdad,
haz que el Reino que das tú, Señor,
llegue pronto a nuestro corazón,
que el amor que Tu Hijo nos dejó,
ese amor, esté ya con nosotros.
Padre Nuestro, que estás en el Cielo,
Santificado sea tu nombre,
Venga a Nosotros tu Reino,
Hágase tu voluntad aquí en la Tierra como en el Cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día,
perdona nuestras ofensas
como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
no nos dejes caer en la tentación.
Y líbranos del mal.
En el pan de la unidad,
Cristo danos Tú la paz,
y olvídate de nuestro mal
si olvidamos el de los demás.
No permitas que caigamos en tentación
¡Oh, Señor! Ten piedad de nosotros,
ten piedad del mundo.
Cordero de Dios
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo
ten piedad de nosotros, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo
ten piedad de nosotros, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios que quitas el pecado del mundo
danos la paz, danos la paz,
danos, danos, danos
la paz
danos, danos, danos la paz
COMUNIÓN
Peregrino de Emaús
Que llevabas conversando
Me dijiste buen amigo
Y me detuve asombrado
A la vera del camino
No sabes lo que ha pasado
Ayer en Jerusalén
De Jesús de Nazaret
A quien clavaron en cruz
Por eso me vuelvo en pena
A mi aldea de Emaús.
Por la calzada de Emaús
Un peregrino iba conmigo
No le conocí al caminar
Ahora sí, en la fracción del pan.
Van tres días que se ha muerto
Y se acaba mi esperanza
Dicen que algunas mujeres
Al sepulcro fueron de alba
Pedro, Juan y algunos otros
Hoy también allá buscaron:
Mas, se acaba mi confianza
No encontraron a Jesús
Por eso me vuelvo triste
A mi aldea de Emaús.
Oh tardíos corazones
Que ignoráis a los profetas
En la ley ya se anunció
Que el Mesías padeciera
Y por llegar a su gloria
Escogiera la aflicción
En la tarde de aquel día
Yo sentí que con Jesús
Nuestro corazón ardía
A la vista de Emaús.
Hizo seña de seguir
Más allá de nuestra aldea
Y la luz del sol poniente
Pareció que se muriera
Quédate forastero
Ponte a la mesa y bendice
Que al destello de tu luz
En la bendición del pan
Mis ojos conocerán
Al amigo de Emaús.
Quédate (Emaús)
Íbamos dos camino de Emaús
entristecidos, discutiendo;
y sucedió que vimos a Jesús
y no supimos conocerlo.
Él preguntó: "¿qué cosas discutís?"
Dijimos: "lo del Nazareno,
muerto en la cruz en plena juventud,
aún no podemos comprenderlo".
Era Él el Mesías de Israel:
muchos llegamos a creerlo.
¿Y ahora qué? Ya hace tres días que fue
sacrificado por el pueblo".
Él respondió que así debía ser,
que estaba escrito su tormento,
y reavivó nuestra apagada fe:
el corazón ardía por dentro.
Quédate con nosotros, quédate,
ven y comparte nuestro techo.
Quédate con nosotros, quédate,
la oscuridad está cayendo.
Él sonrió y entró para cenar,
partiendo el pan y bendiciendo,
nos lo entregó, diciendo nada más:
"Tomad, comed, esto es mi Cuerpo".
Y después ya no le pudimos ver
pero sabíamos que dentro
Él está con nosotros y, esta vez,
resucitado de los muertos.
Quédate con nosotros, quédate
y cúranos que estamos ciegos
para ver con los ojos de la fe,
así te reconoceremos.
Quédate con nosotros a comer,
reanima nuestro desaliento.
Quédate con nosotros, quédate
y deja que se pase el tiempo.
Procesión de Salida: El Reino de la Vida
Hemos celebrado ya la Cena,
hemos compartido la esperanza.
Vamos a la vida en la confianza,
que el amor redime nuestras penas.
Vamos a anunciar esta alegría
que Jesús sanó nuestras heridas,
vamos a entregar el pan a todos,
vamos, trabajemos codo a codo,
que ha llegado el Reino de la Vida.
Cristo con nosotros cada día,
juntos en trabajos y descanso,
surge de esta mesa y este canto
libre, nuestra suerte compartida.
Esta acción de gracias se reparte
con nosotros a todos los hombres,
nos convoca en favor de los pobres:
alimenta a los que sufren hambre.