Misa domingo 11 de mayo de 2025
Durante la celebración, recuerde desactivar sus ALARMAS y poner su teléfono en modo SILENCIO
«Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo han puesto.». (Juan 20, 2b)
Celebremos
Vamos a cantar al Señor
Un canto nuevo, porque su amor
Es grande por nosotros
Acerquémonos a su mesa.
Unamos nuestras alabanzas
Den gracias al Padre que nos
regala a Jesús
Conocido por el Espíritu
// Celebremos al Señor de la vida
Al Resucitado, Cristo el Señor //
Gocemos de su presencia real
Jesús está con nosotros
Alegría, paz y amor
Para todos que Dios llamó.
Perdón
Señor, Señor, Señor ten piedad.
Cristo, Cristo, Cristo ten piedad.
Señor, Señor, Señor ten piedad.
Salmo
R./ Somos su pueblo y ovejas de su rebaño
Gloria
Gloria a Dios en el cielo
Y en la tierra paz a los hombres que ama el Señor. (bis)
Por tu inmensa Gloria te alabamos, te bendecimos, te adoramos
te glorificamos, te damos gracias.
Señor Dios, Rey Celestial, Dios Padre Todopoderoso
Señor, Hijo único, Jesucristo
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tú que quitas el pecado del mundo, ten piedad de nosotros
Tú que quitas el pecado del mundo, atiende nuestra súplica
Tú que estás sentado a la derecha del Padre
ten piedad de nosotros.
Porque sólo Tú eres Santo, sólo Tú, Señor, sólo Tú,
Altísimo Jesucristo, con el Espíritu Santo
en la Gloria de Dios Padre. Amén, amén.
Aleluya
¡Es el Señor, aleluya!
¡Jesús resucitó!
¡Aleluya, aleluya!
Oración de los fieles
Que te escuchemos Señor
Te presentamos nuestra oración
Dios de la Vida, Dios del Amor
Nuestras vidas que ofrendas se harán
Traemos, Señor, a tu altar
Nuestras vidas que ofrendas se harán
Por Jesús, con Jesús,
sacrificio de amor y cruz.
Transforma tus dones, Señor,
Junto a Cristo tu pueblo dará
Lo mejor para ti,
padre bueno, nuestro creador.
Selló con su sangre la alianza final,
Mesías sagrado, cordero pascual,
Venciendo al pecado y toda maldad
Pasó de la muerte a la vida.
La Iglesia es el cuerpo de Cristo Jesús
Se une a tu hijo para actualizar,
Memoria y presencia el ara será
esperando su nueva venida.
Humildes regalos te haremos llegar,
Trabajos y esfuerzos y nuestra oración,
Convierte nuestros corazones, Señor,
En signo de la Eucaristía.
Santo
Santo, Santo, Santo es el Señor
Dios del Universo, Santo es el Señor.
El cielo y la tierra,
están llenos de tu Gloria
Hosanna en el cielo.
Bendito es el que viene
En el nombre del Señor
Hosanna en el cielo.
Padre Nuestro
Padre Nuestro, Tú que estás,
En los que aman la verdad
Haz que el Reino que das tú, Señor,
Llegue pronto a nuestro corazón,
Que el amor, que tu hijo nos dejó
Ese amor, esté ya, con nosotros.
Padre Nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu nombre.
Venga a nosotros tu Reino. Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día. Perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden.
No nos dejes caer en la tentación y líbranos del mal.
En el pan de la unidad,
Cristo danos tú la paz
Y olvídate de nuestro mal,
Si olvidamos el de los demás,
No permitas, que caigamos en tentación
Oh, Señor, ten piedad de nosotros,
Ten piedad del mundo.
Cordero de Dios
Cordero de Dios,
Tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios,
Tú que quitas el pecado del mundo,
ten piedad, ten piedad de nosotros.
Cordero de Dios,
Tú que quitas el pecado del mundo,
danos la paz, tu paz Señor, danos la paz.
¿Quién nos separará?
¿Quién nos separará de su amor?
¿La tribulación, tal vez la espada?
Ni muerte o vida nos separará
Del amor de Cristo Señor.
¿Quién nos separará de su bondad?
¿La persecución, quizá el dolor?
Ningún poder nos separará
Del amor de Cristo Señor
¿Quién nos separara de su alegría?
¿quién nos arrancara su perdón?
Nadie en el mundo nos separará
De la vida en Cristo Señor
Tu modo
Jesús, al contemplar en tu vida
el modo que Tú tienes de tratar a los demás
me dejo interpelar por tu ternura,
tu forma de amar nos mueve a amar;
tu trato es como el agua cristalina
que limpia y acompaña el caminar.
Jesús, enséñanos tu modo
de hacer sentir al otro más humano,
que tus pasos sean nuestros pasos;
nuestro modo de proceder.
Jesús, hazme sentir con tus sentimientos,
mirar con tu mirada, comprometer mi acción,
donarme hasta la muerte por el reino,
defender la vida hasta la cruz,
amar a cada uno como amigo,
y en la oscuridad llevar tu luz.
Jesús, yo quiero ser compasivo con quien sufre,
buscando la justicia, compartiendo nuestra fe,
que encuentre una auténtica armonía
entre lo que creo y quiero ser,
mis ojos sean fuente de alegría,
que abrace tu manera de ser.
Quisiera conocerte, Jesús, tal como eres.
Tu imagen sobre mí es lo que transformará
mi corazón en uno como el tuyo
que sale de sí mismo para dar;
capaz de amar al Padre y los hermanos,
que va sirviendo al reino en libertad.
Como el Padre me amó
Como el Padre me amó,
yo os he amado.
Permaneced en mi amor (bis)
Si guardáis mis palabras
y como hermanos os amáis
compartiréis con alegría
el don de la fraternidad.
Si os ponéis en camino,
sirviendo siempre la verdad,
fruto daréis en abundancia.
Mi amor se manifestará
No veréis amor tan grande
como aquél que os mostré.
Yo doy la vida por vosotros.
Amaos como yo os amé.
Si hacéis lo que os mando
y os queréis de corazón
compartiréis mi pleno gozo
de amar como Él me amó.
Reino de la Vida
Hemos celebrado ya la cena
Hemos compartido la esperanza
Vamos a la vida en la confianza
Que el amor redime nuestras penas.
Vamos a anunciar esta alegría,
Que Jesús sanó nuestras heridas
Vamos a entregar el pan a todos,
Vamos trabajemos codo a codo
Que ha llegado el reino de la vida.
Cristo con nosotros cada día
Juntos en trabajos y descanso
Surge de esta mesa y este canto
Libre nuestra suerte compartida
Esta acción de gracias se reparte
Con nosotros a todos los hombres
Nos convoca a favor de los pobres
Alimenta a los que sufren hambre.